Las 7 etapas de la demencia: qué esperar
La demencia es una enfermedad progresiva que afecta la capacidad cognitiva y funcional de una persona, y se cree que afecta a más de 50 millones de personas en todo el mundo. A medida que la demencia avanza, pasa por diversas etapas que presentan una serie de síntomas y desafíos para el paciente y sus seres queridos. En este artículo, exploraremos las 7 etapas de la demencia y qué se puede esperar en cada una de ellas.
Etapa 1: no hay deterioro cognitivo
En esta etapa inicial, el individuo no presenta señales evidentes de deterioro cognitivo. Aunque puede haber algunas dificultades leves de memoria, la persona sigue siendo capaz de realizar sus actividades diarias sin ninguna dificultad importante.
Etapa 2: deterioro cognitivo leve
A medida que avanza la demencia, la persona puede comenzar a experimentar lapsos de memoria más pronunciados. Puede tener dificultades para recordar nombres, fechas o eventos recientes. Además, puede tener problemas para encontrar las palabras adecuadas para expresarse o perder objetos con frecuencia. Aunque estos síntomas pueden ser preocupantes, aún son lo suficientemente leves como para que el individuo pueda funcionar de manera independiente con un poco de apoyo adicional.
Etapa 3: deterioro cognitivo moderado
A medida que progresan los síntomas de la demencia, el individuo puede experimentar dificultades más significativas en su vida diaria. En esta etapa, puede tener dificultades para recordar eventos pasados, olvidar detalles importantes y tener problemas para planificar y organizar sus actividades diarias. Pueden comenzar a manifestarse cambios en el comportamiento, como la irritabilidad o la pérdida de interés en actividades que antes disfrutaba. En esta etapa, la persona generalmente necesita más apoyo para llevar a cabo tareas cotidianas y debe comenzar a considerar opciones de cuidado a largo plazo.
Etapa 4: deterioro cognitivo moderadamente severo
A medida que la demencia empeora, los síntomas se vuelven más evidentes y el individuo puede requerir asistencia para realizar actividades básicas como vestirse y alimentarse. La memoria a corto plazo se ve significativamente afectada, lo que puede generar confusión y desorientación. Es posible que la persona tenga dificultades para reconocer a los miembros de su familia y amigos cercanos. El comportamiento también puede volverse más impredecible y puede haber cambios en la personalidad. En esta etapa, es importante contar con un plan de atención adecuado y apoyo emocional para el paciente y su familia.
Etapa 5: deterioro cognitivo severo
En esta etapa avanzada de la demencia, el individuo pierde casi toda capacidad de funcionar de manera independiente. Necesita asistencia para realizar las actividades básicas de la vida diaria, como comer, vestirse y asearse. La memoria a largo plazo también se ve comprometida, lo que significa que pueden olvidarse de eventos y personas importantes de su vida. Es posible que experimenten alucinaciones, delirios o agitación. La supervisión constante y el apoyo a tiempo completo son esenciales en esta etapa.
Etapa 6: deterioro cognitivo muy severo
En esta etapa final de la demencia, el individuo prácticamente pierde la capacidad de comunicarse y depende por completo de la atención de los demás. Puede ser incapaz de reconocer a sus seres queridos y puede tener dificultades para tragar o controlar su vejiga e intestinos. La persona puede experimentar cambios en la personalidad y en el estado de ánimo, y es esencial proporcionar una atención compasiva y respetuosa en esta etapa.
Etapa 7: deterioro terminal
La última etapa de la demencia se caracteriza por una reducción significativa en la función cognitiva y física. La persona está en un estado muy frágil y es posible que experimenten una disminución en la capacidad para moverse, tragar y comunicarse. A medida que entra en esta etapa, el enfoque principal debe ser brindar comodidad y cuidados paliativos para garantizar la calidad de vida del paciente.
En resumen, la demencia es una enfermedad progresiva que pasa por 7 etapas diferentes, cada una con sus propios desafíos y síntomas. Es fundamental comprender estas etapas para poder brindar el apoyo adecuado y el cuidado necesario a los pacientes y a sus seres queridos.
Bibliografía complementaria:
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8. Stahl, S. M. Stahl’s Essential Psychopharmacology: Neuroscientific Basis and Practical Applications. New York, NY: Cambridge University Press; 2013.
Estas obras proporcionan una variedad de perspectivas y conocimientos en el campo de la psicología y la psiquiatría, abordando desde los trastornos mentales hasta técnicas de evaluación y tratamiento. Es importante tener en cuenta que esta lista no es exhaustiva y que existen numerosos otros libros y artículos académicos que también pueden ser de utilidad en el estudio de estos temas.